Infertilidad masculina
La tasa de infertilidad se sitúa entre el 15 y el 17% de la población española. El 50% de las causas de infertilidad son de origen masculino, y es por ello por lo que el diagnóstico de la infertilidad masculina es fundamental para poder aplicar el tratamiento más adecuado al varón y que pueda lograr tener hijos con su pareja.
¿Cómo se puede conocer la fertilidad del varón?
A través de un sencillo estudio del semen (seminograma) se pueden conocer datos tan importantes e influyentes en la fecundación de los óvulos, como el nivel de movilidad de los espermatozoides, su número total y su morfología.
Cuando se evalúa la morfología de los espermatozoides se detecta su capacidad de fecundación. Además de evaluar la morfología, se puede realizar un estudio de la meiosis, que permite valorar si existen alteraciones cromosómicas en el momento de la producción de los espermatozoides, que puedan ser responsables de los abortos o del fracaso en tratamientos de reproducción asistida; y, con FISH (Fluorescence In Situ Hybridization), se estudian las alteraciones en número y estructura de los cromosomas de los espermatozoides.
Causas de la infertilidad masculina
El bajo recuento de espermatozoides puede estar relacionado con el consumo de tabaco y/o alcohol, con la obesidad, con un trastorno hormonal o con el uso de ropa interior apretada, entre otras causas.
Además, los problemas en la eyaculación, como la eyaculación precoz o la disfunción eréctil, pueden comprometer el número y la calidad de los espermatozoides.
Asimismo, la presencia de algunas patologías relacionadas con la infertilidad, como el varicocele, deben ser examinadas y eliminadas con el tratamiento recomendado por el especialista, para así evitar complicaciones derivadas y ausencia de espermatozoides que impidan la fecundación.
En casos de vasectomía, cuando el varón se arrepiente de haber realizado esta operación, puede revertirla y/o extraer una nueva muestra de semen de sus testículos. De esta forma, el paciente podrá ser padre tras procesarse la muestra en el laboratorio.
Cuando un paciente, adulto o niño, padece cáncer, se puede congelar una muestra de su semen antes de comenzar el tratamiento contra su enfermedad.
De esta manera, podrá ser padre con sus propios gametos cuando lo desee.
Tratamiento de la infertilidad masculina
Todo depende de cada caso, pero la infertilidad masculina se puede tratar a través de la toma de medicamentos que incrementan la producción de espermatozoides o de tratamientos hormonales que recuperen la función hormonal, además de la valoración de la cirugía.
Cuando no existe solución aparente, se realiza la selección de los espermatozoides en el laboratorio para escoger los de mayor calidad, que serán los que después se utilicen en los tratamientos de reproducción asistida.
El Dr. Luis García Reboll es, además de urólogo, especialista en andrología. Por ello, desde hace años colabora en Valencia con la Unidad de Andrología del Centro Médico de Reproducción Asistida CREA.