El sistema urinario
El sistema urinario está formado por riñones, uréteres, vejiga y uretra. Los riñones son los encargados de fltrar la sangre y generar la orina, que baja por los uréteres hasta llegar a la vejiga, donde se almacena y, de forma voluntaria, se expulsa hacia el exterior a través de la uretra.
Tipos de infecciones en el tracto urinario
Las infecciones en el tracto urinario o ITU tienen diferentes denominaciones en función del lugar concreto donde están localizadas.
Por tanto, cuando la infección aparece en el riñón, se trata de una pielonefritis; cuando está en la vejiga hablamos de cistitis y, por último, cuando se localiza en la uretra, recibe la denominación de uretritis.
Además de las anteriores, en el varón se pueden presentar otras infecciones, tales como la infamación en la próstata (prostatitis), en los testículos (orquitis) y en el epidídimo (epipidimitis).
Este tipo de infamaciones son más comunes entre la población femenina: hasta un 50% de las mujeres pueden presentar una infección en el tracto urinario a lo largo de su vida. En el caso del varón, por regla general es mayor el riesgo durante el primer año de edad y a partir de los 50 años.
Además, se trata de las infecciones nosocomiales (adquiridas durante la estancia en un hospital) más frecuentes en España, normalmente a causa del sondaje o del trasplante de riñón, entre otras posibles razones.
¿Cómo se detectan las infecciones en el tracto urinario?
Normalmente, las infecciones en la parte inferior del tracto urinario, es decir, las que afectan a la vejiga y la uretra, suelen producir dolor localizado o escozor al orinar. Sin embargo, las infecciones de la parte alta que afectan al riñón, como la pielonefritis, pueden producir fiebre.
También puede ocurrir que no se manifeste ningún síntoma, pero que sí que se detecten bacterias en la orina. Esto es lo que se denomina bacteriuria asintomática, que no genera ningún tipo de complicación para el paciente y, por tanto, no es necesario que sea tratada.
Diagnóstico de las infecciones en el tracto urinario
El diagnóstico de las ITU se realiza a través de un análisis de orina, en la que se
detecta la presencia de diferentes bacterias que revelan la existencia de una
infección.
Tratamiento de las infecciones en el tracto urinario
El tratamiento de las infecciones en el tracto urinario suele ser a través de la ingesta de antibiótico durante un periodo de tiempo determinado en función del tipo de infección y el nivel de gravedad de cada caso.
Es recomendable que los pacientes traten de orinar con frecuencia, que eviten el consumo de alcohol y los alimentos picantes o con cafeína, así como que beban entre 2 y 4 litros de agua al día. Para aliviar el dolor, el tratamiento se puede combinar con medicamentos antiinfamatorios como el ibuprofeno.