El cólico nefrítico se produce como consecuencia de la obstrucción de la vía urinaria por una litiasis o piedra formada en el riñón.
Se trata de un problema que detectamos más frecuentemente en el sexo masculino: se calcula que hasta un 10-20% de hombres y un 3-5% de mujeres podría padecer un cólico nefrítico en al menos una ocasión a lo largo de su vida. Y normalmente se produce en personas de entre 30 y 60 años.
En los siguientes puntos que componen este artículo te detallamos todo sobre este problema.
Índice del artículo
Cólico nefrítico: ¿En qué consiste y por qué ocurre?
Un cólico nefrítico es un síntoma caracterizado por un intenso dolor localizado en un lado de la zona lumbar o parte baja de la espalda, donde se encuentran los riñones.
Tiene su origen en la obstrucción y dilatación que se produce en el sistema urinario por la formación de piedras en el riñón (litiasis), aunque también puede ocurrir cuando existen alteraciones que afectan a uno o ambos uréteres (conductos que trasladan la orina desde la vejiga hacia el exterior), como tumores, coágulos, infecciones o malformaciones. En todos estos casos ocurre lo mismo: se impide que la orina avance de manera normal por el tracto urinario y esta queda retenida, aumentando la presión y generando un agudo dolor.
La mayoría de los cálculos renales son de calcio, aunque también pueden formarse a raíz de determinadas infecciones y patologías que hacen que se compongan de otras sustancias como la cistina o el ácido úrico.
En relación a los factores de riesgo, podemos afirmar que la falta de hidratación (beber poca agua), el hecho de tener antecedentes familiares, de llevar una dieta rica en proteínas de origen animal y sodio, de padecer determinadas enfermedades como la obesidad, la diabetes, la hipertensión, la cistinuria o de tener infecciones de orina recurrentes, así como la toma de algunos suplementos como determinados laxantes y diuréticos, pueden influir en la formación de cálculos renales.
¿Cuánto dura un cólico nefrítico?
Normalmente, el intenso y repentino dolor que se experimenta cuando se produce el cólico nefrítico no es continuo y remite pasadas unas horas. Sin embargo, podría ocurrir que se prolongara durante varios días.
En cualquier caso, es fundamental siempre acudir al especialista para que pueda revisar lo ocurrido y realizar un diagnóstico.
Síntomas: Cómo saber si estamos sufriendo un cólico nefrítico
El síntoma más relevante y el que verdaderamente nos llamará la atención es el fuerte dolor, repentino, que se produce en un lado de la zona baja de la espalda, en el área lumbar. Este también puede llegar a proyectarse por el flanco lateral hacia la zona baja del abdomen o los genitales, pues depende de dónde esté localizada la obstrucción del uréter.
Además de este característico dolor, se puede tener fiebre, sudores fríos, náuseas o vómitos, así como detectar la presencia de sangre en la orina (hematuria) o tener mayor urgencia o problemas para orinar correctamente (con dolor: disuria, más a menudo: polaquiuria o dejar de orinar: anuria).
Cuando se perciben estos síntomas y se consulta con el urólogo, especialista en el diagnóstico y tratamiento de este tipo de patologías, este realizará una serie de pruebas que confirmen que se trata de un cólico nefrítico. Entre estas, se puede llevar a cabo una radiografía abdominal, una ecografía o un uroTAC.
Tratamiento del cólico nefrítico
Tras el reconocimiento médico y el consiguiente diagnóstico del cólico nefrítico, se pautará un tratamiento individualizado para cada caso.
Para mitigar el dolor se recomendarán analgésicos o antiinflamatorios, tanto de forma oral como inyectados por vía intramuscular o intravenosa, en caso de que se haya ingresado en el hospital. Además, se podrán recetar antiespasmódicos y recomendar la aplicación de calor en la zona afectada. De esta forma, lo general es que el problema se resuelva con normalidad.
Cuando con estas medidas no se consiguen expulsar los cálculos por el tracto urinario, se puede optar por la colocación de un catéter ureteral (Doble J) y valorar, posteriormente, la realización de una litotricia para ayudar a deshacer las piedras. En el caso de una litiasis ureteral, se puede realizar una ureteroscopia y aplicación de laser para pulverizar las piedras. Si los cálculos son de mayor tamaño, pueden requerir de una intervención quirúrgica para eliminarlos (nefrolitotomía percutánea).
3 consejos para prevenir el cólico nefrítico
Como en cualquier otro caso, y aunque será el especialista el que realizará sus recomendaciones para cada paciente en particular, en general para poder prevenir el cólico nefrítico es fundamental llevar una vida sana, con una alimentación saludable y equilibrada, aumentando nuestra ingesta diaria de líquidos -priorizando siempre el agua-, y reduciendo el consumo de proteína animal, de sal y de azúcar.
El tipo de agua siempre ha sido tema de discusión. En general, se recomiendan aguas poco mineralizadas, aunque conocer el tipo de litiasis nos permitirá recomendar mejor un tipo u otro de agua.
Además, es importante realizar ejercicio físico, adecuado a las necesidades y capacidad de cada uno, siempre de forma moderada y regular.
Y, por supuesto, acudir a nuestro urólogo de confianza, tanto para ayudarnos a prevenir cualquier tipo de problema, como para apoyarnos en el diagnóstico de patologías como el cólico nefrítico.
